sábado, 19 de diciembre de 2009

Bienvenidas las tan ansiadas vacaciones!!!

viernes, 11 de diciembre de 2009

Del otro lado...

El vaivén de tu brazos al deambular,
el subibaja de tus hombros al desplazarte
tus ojos esfórzandose por captar aún más la perspectiva
Tus manos y tus uñas...
Ese cigarrillo a medio fumar,
el humo que acarició tus pulmones el instante previo a toparse conmigo
tu indiferencia tan atenta(infiel a su esencia),
los hoyuelos a cada lado de tus labios
tu sonrisa armonizando a los anteriores
Del otro lado...
La ansiedad de verlo todo.
El ímpetu de mis retinas archivando imágenes.
El cuerpo vibrantemente en equilibrio
mi sonrisa constante y cotidiana
mis ojos evidenciando las obviedades
mis palabras a borbotones enmudecidas
mis sensaciones de fiesta
mis brújulas orientadas hacia tu norte
del otro lado...un espejo.

viernes, 4 de diciembre de 2009

Obviedades...


¿Cuál es la sencilla razón por la cual, en ese momento en el que debes decir la palabra justa,esa que abra las puertas de un diálogo que conduzca al país del nunca jamás; una disfasia abrupta y de modo violento se instala...y terminas expresando una incoherencia de excelencia...?

¿Cuál es la simple razón por la cual normalmente suelen brotarte las palabras por exceso,pero ahí, en ese instante donde te conectas con los ojos y el alma del otro y miras con detenimiento,y tu alma se sonroja; una avalancha de enmudecimiento te irrumpe y olvidas hasta tu nombre...?

¿Cuál es la bendita razón por la cual no encuentras espacio en tu propio cuerpo, y las moléculas que constituyen tu materia prima entran en caos atómico y algo sucede por ahí,tu cuerpo se pinta de colores...violeta, a veces verde y olvidas hasta el vaivén inconsciente de tus brazos al caminar...?

Razón obvia si las hay...


miércoles, 2 de diciembre de 2009


¿Qué sucederá en el cielo cada ves que se desprende con ímpetu una décima de ml. de ese líquido tan noble?...
No lo sé,soy mujer de tierra, pero sé lo que genera a estos niveles terrenales...
La gente por lo general contrae los músculos orbiculares de los párpados con intensidad, como queriendo en ese acto detener la canilla celestial que sorpresivamente los encontró sin paraguas ni resguardo...
Están los que corren de a pasos cortos con el afán de que al transcurrir menos tiempo detenidos sobre la superficie goteante, la humedad que penetre los huesos sea menor, sin embargo por esas leyes naturales inexplicables suelen ser los que más mojados se lucen en tal escenario...
Muchos son los que hacen dudar si el agua cae desde arriba o llueve desde el suelo, porque entre los saltos desenfrenados y los conductores automovilísticos que sueñan en Rally,las rodillas quedan suspendendidas en un mar metropolitano...
Y estamos los que por alguna razón muy obvia aminoramos la marcha.Después de un deliberado diálogo interno entre lo normal socialmente hablando y lo ideal personalmente sintiendo, detenemos el ritmo agitado diario, relajamos los músculos trapecios y aledaños y emprendemos una experiencia interesante. Y odiamos a las señoras que no solo se pierden ese instante, sino que con las puntas de sus paraguas irrumpen la armonía de tal placer. Por momentos alzamos la vista al cielo como con ansias de que la próxima gota golpeé y no inesperadamente. Abrimos los brazos casi de un modo disimulado, como queriendo abarcar aún más el área a embeber...y sentimos como nuestros pies se sienten encharcados y hasta en un sentido simpáticos...
Todos, tal disparidad conviviendo junta...desafiante.