viernes, 26 de marzo de 2010


Hoy amanecí, casi amaneciendo...y no en el sentido más estricto temporalmente hablando...
Sino que amanecí en un amanecer que se constituyó en el instante previo en que mis párpados se abrieron y "mi yo" adquirió nuevamente su magnitud de vigilia...
Desperté flotando entre un colchón de bolas de algodón, el que me condujo hacia el camino de los encuentros...
Fue en esa senda interminable en la que la existencia de otros confirmo mi propia existencia...
En la que mi sensibilidad adoptó la forma de mis rincones, simplemente porque me tope con la sensibilidad ajena...
Es que esto funciona como grandes espejos que fundamentan la existencia de lo que reflejan?...
Es que me descubro en la medida que salgo de mi misma?...
Es que mi humanidad se confirma en las experiencias más humanas?...
Es que mi sensibilidad es mi modo de receptar una realidad percibida e incluyente?
Es que simplemente amanecí...y mis párpados se abrieron...es que simplemente las señales
más humanas resultan de encuentros inesperados, inconcientemente ansiados, escondidamente buscados...
Felizmente encontrada!

jueves, 18 de marzo de 2010

¿Qué pasaría si un día despertamos dándonos cuenta de que somos mayoría?

¿Qué pasaría si de pronto una injusticia, solo una, es repudiada por todos, todos que somos todos, no unos, no algunos, sino todos?

¿Qué pasaría si en vez de seguir divididos nos multiplicamos, nos sumamos y restamos al enemigo que interrumpe nuestro paso?

¿Qué pasaría si nos organizáramos y al mismo tiempo enfrentáramos sin armas, en silencio, en multitudes, en millones de miradas la cara de los opresores, sin vivas, sin aplausos, sin sonrisas, sin palmadas en los hombros, sin cánticos partidistas, sin cánticos?

¿Qué pasaría si yo pidiese por vos que estás tan lejos, y vos por mí que estoy tan lejos, y ambos por los otros que están muy lejos y los otros por nosotros aunque estemos lejos?

¿Qué pasaría si el grito de un continente fuese el grito de todos los continentes?

¿Qué pasaría si pusiésemos el cuerpo en vez de lamentarnos?

¿Qué pasaría si rompemos las fronteras y avanzamos, y avanzamos, y avanzamos, y avanzamos?

¿Qué pasaría si quemamos todas las banderas para tener solo una, la nuestra, la de todos, o mejor ninguna porque no la necesitamos?

¿Qué pasaría si de pronto dejamos de ser patriotas para ser humanos?

¿No sé… me pregunto yo, qué pasaría?

Mario Benedetti